miércoles, 6 de julio de 2016

3 poemas



MI VIDA ES UNA GATA

Mi gata sufre el mal de la ansiedad,
una ansiedad
que nunca quiere colocar sobre mis hombros.
Puede vivir durante meses
sin la estrangulación de la ansiedad
pero a veces
regresa con ataques de nerviosismo
o de pánico.
De ella aprendí, he aprendido, aprendo
a escribir cada vez más sobrio y duro
todos los días.
Cuando dibujamos
la gata está tumbada contenta, cerca.



TURNO DE NOCHE

En la oscuridad
soy un cordel descolorido.
En la oscuridad
me despierto.
La loba de tu desnudo
mastica los papeles blancos.
Sueltas un raro gemido
y me dejas solo.

Los ciervos discuten
en un abedul junto a tu cama.
Estás riendo entre mis brazos.
En la oscuridad
las rosas se terminan.
En la oscuridad
lo confieso:
yo soy tus pechos, tu boca, tu olor,
tú siempre dudas en defensa propia.




PARA SUSAN

415 días hace que Susan
se lanzó sobre su armario
y tiró sus abrigos,
vació sus cajones de ropa interior,
arrojó libros orientaloides ,
medias y bisutería;
quitó todas sus fotos del album,
destrozó grafitos
que no la amaban ya,
cosméticos
y revistas de moda;

se deshizo de las dudas que rondaban
su cabeza,
sus discos,
su despertador,
sus bañadores y sus cartas.
¿Cómo te llamas?, gritó alguien.
¿Qué cómo me llamo?
Hombre, pues, llámame Nausícaa
simplemente...